Vamos cubriendo etapas, sumando kilómetros, acumulando
nuevas experiencias y, al mismo tiempo, una gran dosis de cansancio. Atrás
dejamos Banckok, Sydney, Ayers Rock y Cairns. Allí nos detuvimos tres días, que aprovechamos
para subir hacia el norte y, pasando por, Port Douglas y Mossman, llegar hasta el cape Tribulation y
el Parque Nacional Daintree, que
permanece casi aislado como un reducto perdido de la naturaleza en estado puro.
Fue una bonita experiencia en la que además de dar un pequeño paseo por la selva tropical, recorrimos en barca el río Daintree. El objetivo era ver algún cocodrilo, pero a pesar de las buenas intenciones del barquero que de forma intrépida se introducía entre el ramaje y la maleza de las orillas apurando todos los rincones del río, nos quedamos con el intento. Los cocodrilos reposaban en dulce sueño, tal vez en espera, como nosotros, de que alguna presa fácil se pusiese a su alcance.
Posteriormente recorrimos en coche el estado de Queensland con su gran barrera de coral. Las distancias eran
inmensas y nos vimos obligados a pasar muchas horas por esas solitarias
carreteras haciendo prácticas de conducir por la izquierda, observando el paisaje y buscando, entre los
árboles la imagen de algún coala o el suntuoso saltar de algún extraviado
canguro. Pero, como en el caso anterior, nos quedamos con la ilusión y sólo pudimos
apreciar las huellas de las víctimas canguriles que el asfalto se va
cobrando.
Poco a poco, fuimos surcando el camino,
cubriendo hitos (Townsville, Airlie
Beach, Tannom, Herevery Bay) y descubriendo, entre los muchos kilómetros, espacios remotos y playas solitarias donde
nos detuvimos a estirar las piernas o a observar con más detalle lo genuino de
cada lugar.
Entre las actividades realizadas en estos días
de ruta he de destacar dos: nuestra salida en un crucero hacia Whitsunday por la gran barrera de Coral y nuestro paseo por la isla Fraser. En las dos hemos saboreado y disfrutado de unos espacios agrestes y protegidos,
como Parques Naturales, donde el impacto
humano está limitado, la naturaleza se mantiene viva: árboles, arbustos en
perfecta sintonía; agua, corales y arenales que nos han dejado, como se suele decir, boquiabiertos
e impactados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario